¿Es posible obtener mi divorcio sin pleitos interminables?

Por supuesto que es posible, el sistema que empleamos para la atención del conflicto –en caso de haberlo- permite que el diálogo pueda no sólo ser restablecido inmediatamente, sino que también sea reencauzado.

Se trata de no convertir el proceso de divorcio en una oportunidad más de discusión, reproches o señalamientos. No, todo lo contrario. Hay rescatar y potencializar la capacidad que cada ser humano tenemos de optar por la Paz, la armonía y el bienestar.

En la psique de cada persona está la semilla del diálogo, de la conveniencia propia y del bienestar general.

Sin lugar a dudas, por la experiencia en la materia, sabemos que el manejo de las emociones, las actitudes y los sentimientos inciden en favor o en contra de tener un acuerdo o un gran pleito; lo que nos debe quedar claro, es que en todo proceso de divorcio, luego de cualquier tormenta sigue la calma, y es ahí en donde la metodología aplicada al caso surte sus efectos.

Dialoguemos.

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